Crece la tensión entre Croacia y Serbia por la llegada de refugiados

La pasada medianoche, Serbia cerró su frontera a la entrada de camiones y mercancías croatas, en respuesta a una medida similar aprobada por Zagreb para presionar a Belgrado para que deje de enviar a todos los refugiados a su territorio y desvíe a algunos hacia Hungría.

El ministro del Interior croata, Ranko Ostojic, confirmó hoy a varios medios que Croacia bloqueó esta mañana el paso de vehículos con matrículas serbias a Croacia y precisó que los ciudadanos serbios pueden entrar. La única excepción al bloqueo de vehículos son camiones con mercancías perecederas. Ostojic dijo que el bloqueo croata estará en vigor hasta que Serbia no anule el suyo a los camiones con mercancías croatas.

Croacia abrió el fuego de esta política de cierres fronterizos al cerrar el lunes el paso de camiones de carga desde Serbia y condicionar el desbloqueo a que Serbia deje de enviar a Croacia a todos los refugiados que llegan a su territorio.

Ostojic advirtió el martes de que Serbia debería enviar a parte de los inmigrantes también a Hungría ya que, de lo contrario, existe el riesgo de una catástrofe humanitaria en la frontera.

El flujo de refugiados que viene desde Oriente Medio, a través de Turquía, Grecia y Macedonia, continuaba por Serbia y Hungría hasta que este país cerró su frontera la semana pasada, forzando que el éxodo se desviara hacia Croacia.

Desde entonces, más de 45.000 refugiados ha entrado en el país. Croacia recibe a los refugiados y los dirige hacia Hungría, desde donde siguen luego, primero hacia Austria y luego hacia Alemania y otros países ricos de Europa.