Putin, en la cuerda floja

Es más, el Kremlin trata ahora de distanciarse de los rebeldes prorrusos, pide una investigación minuciosa de lo sucedido y llama a las partes contendientes en el este de Ucrania a cesar la violencia y a negociar un acuerdo de paz. Sin embargo, el presidente ruso, Vladímir Putin, se encuentra en una difícil situación.

Si la investigación que deberá comenzar pronto demuestra que Rusia está implicada en el derribo del avión malasio, las sanciones adoptadas hasta ahora se recordarán como un leve arañazo casi indoloro. Sobre Moscú pende la amenaza de convertirse en un apestado más de la Comunidad Internacional, como Corea del Norte. Tras la anexión de la península de Crimea en marzo, Rusia marcha de forma decidida por la senda del aislamiento.

El ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, negó hoy que su país haya participado de alguna manera en el derribo del vuelo MH17 (Amsterdam-Kuala Lumpur) y advirtió que las acusaciones lanzadas por Kiev son prematuras y pretenden ejercer presión sobre la investigación. Por su parte, el Ministerio de Defensa ruso daba a entender que el disparo del misil que abatió la aeronave malasia fue efectuado por el Ejército ucraniano.

Putin se mostró este mediodía más pacifista que nunca. Durante un encuentro con Kiril, el Patriarca de la Iglesia Ortodoxa rusa, celebrado en un monasterio cercano a Moscú, el presidente ruso afirmó que en Ucrania debe ser restablecida la paz lo antes posible y para ello deben comenzar contactos directos entre todas la partes enfrentadas. Putin dijo haber pedido ayuda a Kiril para lograrlo. Aseguró también estar en contacto permanente con su homólogo ucraniano, Piotr Poroshenko. Antes de verse con el Patriarca, el jefe del Kremlin instó a realizar una investigación escrupulosa y objetiva.

Según comunicado del departamento de prensa de la Presidencia rusa, Putin habló por teléfono con el primer ministro holandés Mark Rutte, a quien le dijo que esta tragedia ha demostrado de nuevo la necesidad de una solución urgente y pacífica a esta aguda crisis en Ucrania.

La pasada madrugada, durante una reunión del núcleo económico del Gobierno ruso, Putin recalcó que sin duda, el Estado sobre cuyo territorio sucedió esto, tiene la responsabilidad de esta horrible tragedia. Según su opinión, esto no hubiera sucedido si en esa tierra hubiera habido paz, si no se hubiera reanudado la operación militar.