Alemania enfría las expectativas de un acuerdo con Grecia

"No se puede negociar de nuevo antes de la celebración del referéndum", ha sostenido la canciller, en un debate extraordinario en el pleno del Parlamento (Bundestag), centrado en la situación de Grecia. "Un buen europeo no es aquel que busca un acuerdo a cualquier precio, un buen europeo es el que respeta los tratados y la legislación nacional y de esa manera ayuda a que la estabilidad de la eurozona no sufra daños", ha subrayado Merkel antes de defender de nuevo la necesidad de que la UE mantenga su "responsabilidad común" y su "capacidad de compromiso".

La canciller ha asegurado que reconoce que los ciudadanos griegos, un pueblo "orgulloso", afrontan días "muy, muy duros", pero ha destacado que no se puede olvidar que fue el Gobierno de Atenas el que acabó con las negociaciones "de forma unilateral" al convocar el referéndum y que el segundo programa de rescate expiró la pasada medianoche.

Merkel ha admitido que la convocatoria de un referéndum es una decisión soberana y legítima y ha asegurado que el Ejecutivo de Alexis Tsipras puede preguntar "cuando quiera, sobre lo que quiera" y recomendar "lo que quiera", pero que los otros 18 socios del euro también tienen derecho a actuar de forma soberana y mantener una postura "adecuada" ante esa consulta.

En este contexto ha recordado que los ministros del Eurogrupo, ante la nueva petición del Gobierno de Alexis Tsipras de comenzar a negociar un nuevo paquete de ayudas, respondieron: "esperamos al referéndum, antes del referéndum no se puede negociar sobre ningún nuevo programa". Esas negociaciones, ha añadido, no pueden producirse además sin que el Bundestag otorgue un nuevo mandato a su Gobierno.

Merkel ha insistido en que la eurozona es hoy más fuerte que al inicio de la crisis para resistir la actual situación y ha asegurado que el futuro de Europa no está en juego, independientemente de cuál sea el desenlace de la actual crisis en Grecia, siempre y cuando se respeten los "valores" en que se sostienen la unión monetaria y el conjunto de la Unión Europea (UE). "Son días turbulentos pero el futuro de Europa no está en juego, estaría en juego si olvidaríamos lo que somos: una comunidad de derecho y de responsabilidad", ha indicado.

Schäuble minimiza la carta de Tsipras

Previamente, el ministro de Finanzas germano, Wolfgang Schäuble, se había encargado de enfriar las expectativas sobre un próximo acuerdo con Atenas al señalar que éste no puede darse mientras Grecia "no cambie de actitud" hacia las instituciones y ha apuntado que las condiciones para un hipotético nuevo rescate del país heleno serían diferentes y se someterían a la aprobación del Parlamento de Alemania.

Schäuble no considera que la última carta remitida por Tsipras aporte claridad. "La segunda carta de Tsipras no ha aportado claridad (...) No hay una base para una negociación seria, pero siempre estamos abiertos para discutir", ha añadido en rueda de prensa el ministro germano.

En este sentido, Schäuble ha afirmado que la actual situación es "completamente nueva", en referencia a la convocatoria de un referéndum el próximo domingo en el país heleno, subrayando que existen rumores "incluso de cancelación del referéndum". "Esto no es serio, necesitamos claridad y saber cuál es la situación", ha declarado el ministro alemán, quien ha recordado que el país heleno "hasta el momento" no ha cumplido sus obligaciones y ha impagado los créditos del Fondo Monetario Internacional cuando si quiere seguir recibiendo las ayudas pendientes "debe cumplir las condiciones de los acreedores".