«Muguruza es una bomba sin límites»

¿Cuál es estado actual de Carla Suárez?

Lo veo muy bueno. Es una jugadora que hacogido mucha más confianza en ella misma, que mentalmente ha crecido mucho, que empieza a creerse de verdad las cosas que llevamos hablando que ella puede conseguir por su nivel y por su trabajo. En Madrid no la he visto tan bien como en Miami o Indian Wells porque está más tensa, más dubitativa y es normal porque aquí necesitamos más constancia porque ya el partido exige mucho.

¿Qué ha cambiado en Carla Suárez para que haya mejorado tanto este año y no sólo en tierra batida?

Lo que yo creo que ha cambiado es que esta pretemporada pasada fue un punto de inflexión porque cuando acabó el año analizamos muy bien por vídeo lo mejor y lo no tan bueno del año. Evidentemente hubo partidos que marcaron mucho el año pasado como contra Bouchard en Roland Garros con el 4-1 o con Venus Williams después de Sharapova en Cincinnati. Los dos llegamos a la misma conclusión: 'Tienes mucho nivel, pero falta creérnoslo mucho más y ser más valientes y atrevidos en los momentos importantes de los partidos'. Creo que el cambio de este año de Carla es que al final un partido de tenis es una suma de obstáculos y en esos momentos está jugando más valiente y confiando más en ella.

¿Ha sido otro factor favorable la irrupción de Garbiñe Muguruza?

La relación profesional y personal es excelente y ayuda tanto a una como a la otra. Garbiñe es una jugadora muy valiente, muy agresiva, con mucha presencia, que tiene mucha confianza en ella y Carla tiene otras cosas muy buenas como son la regularidad, la constancia, la pausa, la estabilidad en su carácter. Yo creo que mutuamente suman y se ayudan la una a la otra, seguro. Ellas se llevan muy bien, Alejo Mancisidor [entrenador de Muguruza] y yo nos llevamos muy bien, el doble lo juegan juntas y se complementan porque son dos estilos distintos. Yo creo que suman mucho.

¿Lleva el circuito femenino un rumbo hacia robots y pensar menos en la pista?

Se está potenciando totalmente por la envergadura de las jugadoras, por el material, por las superficies y porque cada vez se juega menos en tierra batida. Todo va hacia jugadoras mecánicas en que la parte táctica entra muy poco y la clave es coger el dominio antes que la otra y pegar más fuerte que la otra. Eso quita mucha creatividad, pero al final es hacia donde está evolucionando el tenis y sinceramente creo que el espectador necesita mucho más espectáculo y mucho más variedad y creatividad y menos potencia.

En este sentido el tenis femenino español sí parece haberse adaptado y no el masculino. ¿Está ahí el futuro?

Sí. Te puedo dar el ejemplo de Paula Badosa, que ha llegado conmigo hace cuatro meses. El primer día que me reuní con ella se lo dije muy claro: mides 1'82, tienes una personalidad muy valiente, así que vamos a cambiar tu patrón. Estaba acostumbrada a trabajar el punto, a sacar 'liftado', así que le dije: 'Vamos a sacar como animales y vamos a jugar a tres tiros porque al final o te adaptas o mueres'. O tienes unas jugadores en estas condiciones como Garbiñe y Paula, con ese patrón al que va el circuito, o tienes uno como el de Carla Suárez o Sara Errani, que son más bajitas y tienen que optimizar su tenis. O juegas por potencia o por inteligencia, pero evidentemente es más fácil trabajar con Garbiñe o Paula porque sus condiciones son las que exige el tenis femenino actualmente.

¿Puede hacer eso resurgir el interés por el tenis femenino en España después del vacío generacional tras Arantxa Sánchez-Vicario y Conchita Martínez?

Sí, porque los años más importantes de la carrera de Carla están por llegar, estoy convencido. Ha cogido un nivel de conciencia, mental, un estilo de vida y unos hábitos... El primer día que vino le dije: 'Se compite como se vive y se compite como se entrena'. Estas dos frases que para mí resumen todo están muy asimiladas por Carla ahora con 26 años. Sus próximos cuatro o cinco años van a ser los mejores de su carrera, si no hay lesiones, y para mí Garbiñe Muguruza es una bomba, una jugadora sin límites que ahora necesita su proceso, como todo el mundo, pero por su determinación, por su personalidad, por su valentía... Para mí no tiene límites. Van a dar unas alegrías espectaculares al tenis español y detrás vienen una Paula Badosa, una Sara Sorribes con otras jugadoras. Viene una época muy muy bonita para el tenis español, estoy totalmente seguro.