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Luis F. Gago
Domingo, 12 de abril 2015, 18:45
El británico Danny Kent se llevó con casi diez segundos de ventaja sobre el resto de competidores la victoria en Texas. Lo hizo sin nadie que osara contestarle durante casi toda la carrera. El inglés compitió casi con una mano solo y entró saludando y ... andando en la línea de meta, dejando claro que es el gran favorito para llevarse este Mundial. Junto a él, en el podio del circuito en Austin estuvieron el francés Fabio Quartararo, segundo, y el vasco Efrén Vázquez, tercero, quien hizo una gran remontada.
En una jornada sin apenas historia, todo el protagonismo se lo llevaron las caídas. La primera de relativa importancia la sufrieron Antonelli y Ono en la vuelta siete, dando un giro de 180 grados a la situación de carrera. Con dos favoritos en el suelo, por error del segundo más que por azar del primero, el resto de los pilotos vieron que tenían alas en sus motos suficientes como para dar alguna que otra sorpresa. La situación de asombro la aprovechó Danny Kent, el mejor corredor en las dos carreras que se llevan disputadas de este Mundial, para marcharse y abrir hueco. Un hecho extraordinario ya que en una categoría tan similar en cuanto a características técnicas como es la Moto3 ver unas distancias tan marcadas es complicado, por no decir casi imposible. En un fin de semana cargado de caídas en los entrenamientos libres, no era de extrañar que durante la carrera el número de bajas fuera determinante. Un par de vueltas después, el español Jorge Navarro, el mejor posicionado en ese momento, tuvo que despedirse de Texas por la puerta de atrás tras chocar con la moto de Oliveira.
La parte positiva para el equipo del Estrella Galicia, tras sufrir la baja de Navarro, fue el segundo puesto logrado en la última curva por Quartararo, un francés afincado en España de tan solo 15 años. En teoría el reglamento dicta que hay que tener al menos 16 para competir, pero al haber sido campeón dos veces seguidas de España, al galo se le ha permitido una excepción a la ley para que pudiera estar en Austin celebrando su primer podio a lo grande. Con lágrimas vio la bandera a cuadros final mientras al girarse hacia atrás para comprobar a quiénes había superado pudo observar sin problemas a Efrén Vázquez, un 'veterano' comparado con el francés. El español partía de la posición número 16. Una escalada la realizada por el bilbaíno que lo convierte en uno de los mejores de Moto3.
Mención especial merece la carrera de Ana Carrasco, en el puesto 22, que este domingo se convirtió en la segunda mujer de la parrilla de Moto3 en competir oficialmente junto a María Herrera, que quedó al final en el 17. Pocas conclusiones en el Gran Premio de las Américas, donde los españoles siguen estando a la sombra de la nueva cantera extranjera pujante.
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