Mirotic, duro y con la muñeca caliente

Frente al poderío físico de los franceses, Mirotic hizo olvidar definitivamente a Serge Ibaka y su músculo, porque el jugador de los Bulls, además de no dejarse intimidar en la pintura, dio un paso al frente con el lanzamiento exterior y se atrevió también con las penetraciones. Tantas veces acusado de irregularidad y falta de fortaleza mental en momentos decisivos, confiado en su mano y en el talento que destila, Mirotic respondió ante Francia con contundencia. «Me preparé mucho para este partido. Poco antes, Sergio (Scariolo) me dijo que jugara muy duro, y yo le respondí que estuviese tranquilo, que no se preocupara, que no me iba a arrugar», desveló el exmadridista tras cerrar el partido con 23 puntos (con 5 de 8 en triples) y cinco rebotes en 23 minutos.

Ante la ausencia de Marc Gasol y ocupando la plaza que le concedió Sergio Scariolo en lugar de Ibaka, quien renunció a Río tras la NBA, ya formó Mirotic una pareja interior clave en el pasado Eurobasket. Entonces, cuando tantas dudas había con él, rindió Mirotic a un nivel más que aceptable, junto a su entonces compañero de equipo Pau Gasol, que el pasado año firmó una memorable actuación en las semifinales contra Francia en Lille.

Con el mayor de los Gasol desapercibido en ataque en la primera parte, fue Mirotic el encargado de dar desde le pitido inicial un paso al frente, y no sólo en el terreno ofensivo (además del bombardeo, 4 de 7 en tiros de dos), sino también en defensa, con tres rebotes bajo el aro rival. Sumó también dos robos, no perdió un solo balón, dio dos asistencia y y añadió dos rebotes ofensivos. Y no cometió más de tres personales. Cuando volvió a salir a la cancha en el último parcial, cuando España ya ganaba por 75-49, intentó otro triple. Ese sí le falló, pero ya no importaba nada. «Da igual los puntos que yo meta. Sabíamos que si defendíamos, teníamos muchas opciones de ganar», llegó a comentar Mirotic.