Un día tranquilo

Fue una tarde tranquila para la Sociedad. Muy tranquila y que se encarriló nada más empezar. En la primera jugada de ataque local llegó el primer tanto del encuentro. Metola, con una diagonal, encontró a Laencina en la banda izquierda, el extremo intentó poner el balón al área, Rafa falló y el esférico le quedó a Javi Torres para que el ariete definiera con comodidad. Se rompía de esta manera la mala racha del delantero, que no marcaba desde el mes de octubre, cuando le hizo un tanto al Racing de Ferrol.

Como bien apuntó en la rueda de prensa posterior al partido, Marco Díaz, técnico del Noja, el tanto inicial fue fiel reflejo de lo que aconteció durante los noventa minutos. Y es que la Sociedad no paró de crear problemas a los cántabros con balones a la espalda de los defensas. Los blanquirrojos conocían el guión que debían desarrollar y los dos laterales del Noja ofrecían todas las facilidades del mundo para que pudieran llevarlo a cabo. Por la banda izquierda, sobre todo, Laencina llegó en numerosas ocasiones hasta el área rival y sólo la falta de puntería local impidió que su renta se aumentara antes. Tamayo, disfrutó de una gran oportunidad ante la que Rafa, que tras su fallo en el primer gol se convirtió en el mejor de su equipo, realizó una gran intervención, mientras que un remate de Loza se estrelló en el larguero tras tocar en un zaguero.

La tranquilidad definitiva

El partido entrañaba un riesgo claro. Y es que no estaba muerto. La Sociedad Deportiva Logroñés no sufría, pero sólo tenía una ventaja de un gol. En cualquier jugada aislada, el Noja tenía la opción de dar un susto a los blanquirrojos y poner en jaque de esta manera una victoria que, en principio, no se les debía escapar a los de Abadía. Hacía falta un tanto más y si llegaba antes del descanso, mucho mejor. Y así fue. Laencina puso en juego un saque de esquina y Metola, con un certero cabezazo, aumentó la renta local.

El Noja necesitaba una reacción tras el paso por los vestuarios si quería tener alguna oportunidad de sacar algo positivo. Pero ésta no apareció por ningún lado. La Sociedad siguió disponiendo de todas y cada una de las ocasiones claras del encuentro. Muchas de ellas las mandó al traste Rafa. Paró un disparo de Tamayo y se lució frente a un intento de Toledo y otro más de Ledo.

Hubo que esperar hasta el minuto 71 para que Mandaluniz tuviera algo de trabajo y el guardameta lo solventó con éxito al rechazar un lanzamiento de falta de Hugo Reguero. Un par de lanzamientos de falta, uno de Candelas y otro de Laencina, que se perdieron por encima de la portería cántabra, fueron las últimas opciones de gol de un día tranquilo para la Sociedad Deportiva Logroñés.

Con esta victoria, los riojanos suman 38 y se sitúan de manera momentánea fuera del puesto de promoción de descenso a la espera de lo que haga el Coruxo en su enfrentamiento del domingo contra el Guijuelo.