Cronología de un sóleo maldito

- 15 de diciembre de 2013

La primera lesión de Bale en el sóleo izquierdo ni siquiera llegó en un partido oficial, sino en un entrenamiento en Valdebebas. El galés sufrió un golpe fortuito de parte de Álvaro Arbeloa, que le mantuvo alejado de los terrenos de juego tres semanas. Afortunadamente para el Real Madrid, el parón navideño permitió que sólo se perdiera tres partidos, uno de ellos ante el Olimpic de Xátiva, en Copa del Rey.

- 25 de enero de 2014

Apenas 20 días después de reaparecer ante el Celta, Bale recaía de su lesión frente al Granada, aunque sólo se perdió tres partidos en los ocho días que estuvo de baja: un empate liguero en San Mamés y dos victorias en Copa ante Atlético y Espanyol.

- 18 de abril de 2015

Tardó un año en recaer, tras su etapa de más continuidad en el Real Madrid, pero entonces comenzaría su verdadera odisea en forma de lesiones. A los cuatro minutos de un partido contra el Málaga, pidió el cambio por dolores en el sóleo izquierdo, otra vez. Estuvo sin jugar dos semanas, en las que 'sólo' se perdió dos encuentros de Liga y un derbi de Champions ante el Atlético en cuartos de final.

- 15 de septiembre de 2015

Tras el parón veraniego, y en lo que debería haber supuesto un regreso con las pilas cargadas, el sóleo izquierdo de Bale volvió dando guerra. Un pinchazo a la media hora del partido de Champions ante el Shakhtar le mantuvo fuera de combate 18 días, incluyendo tres encuentros de Liga y otro de Liga de Campeones.

- 17 de octubre de 2015

Tras recuperarse de su anterior lesión, el extremo viajó con Gales para jugar frente a Bosnia y Andorra -este último un amistoso-, y a su regreso fue titular contra el Levante. Sólo duró 45 minutos sobre el césped, antes de que Rafa Benítez lo retirase alegando «fatiga», enmascarando un problema mayor. Bale se perdió dos partidos de Liga y otros dos de Champions, ambos ante el PSG y claves para el desenlace final del grupo.

- 23 de abril de 2017

De vuelta tras tres meses lejos del terreno de juego por una lesión de su tobillo derecho, el galés sufrió un edema en el sóleo de esta misma pierna ante el Bayern de Múnich. Apenas once días después era titular en el clásico frente al Barcelona y su sóleo izquierdo, el de siempre, dijo basta a los 39 minutos.