Reaparece la BBC y disfruta el Real Madrid

También falló un penalti Gameiro, aunque en este caso quien realmente acertó fue el aclamado Keylor Navas, cuando se acercaba la media hora de un partido en el que el Real Madrid firmó una actuación notable, con la reaparición estelar de la BBC, James e Isco en el banquillo, Casemiro titular en el medio campo, Kroos en una posición más adelantada a la habitual, y el equipo más junto y sacrificado, que es lo que le exige el Bernabéu. Volvió Benzema tres semanas después y a la primera que tuvo la enchufó con un gran disparo con la derecha, Cristiano, aunque también se está acostumbrando a fallar penaltis, volvió a marcar a su víctima favorita, y Bale, desatado en ataque pero también volcado en defensa, cerró el marcador contra un decepcionante Sevilla que pagó el esfuerzo de su reciente partido de la Liga Europa ante el Basilea, permitió jugar al poderoso, y no dejó de sufrir en defensa.

Aunque en el Real Madrid faltaban sus centrales titulares, Pepe y Sergio Ramos, quien padeció atrás fue el Sevilla, porque se encontró con un grupo que dio un salto de calidad con quienes parece que serán los futbolistas elegidos por Zidane para optar el sueño de la 'undécima'. Con la letal tripleta de ataque, el equilibrio de Casemiro, a quien cada vez quiere más la afición madridista y, sobre todo, el trabajo defensivo de un equipo que cuando presiona y recupera puede destrozar a cualquier rival teniendo en forma a los de arriba. Frente al Sevilla se conjuró para no dejar salir al rival de su campo en los primeros minutos y ejerció un acoso continuo sobre la portería de Sergio Rico, que se convirtió en el mejor jugador de su equipo, hundido tras el 1-0. Pudo adelantarse el Sevilla a los tres minutos con un centro-chut de Tremoulinas que pegó en el larguero, pero a partir de ese momento el Madrid fue en todo el primer tiempo un vendaval de fútbol de elaboración, ataque y recuperación.

Las llegadas y las oportunidades de gol del Madrid no dejaron de sucederse desde que abrió el marcador Benzema, a quien no querrán en Francia para la Eurocopa, pero que aporta muchísimo en este equipo que celebra sus tantos, asociación y talento. También dio un paso al frente, aunque con el punto negro del penalti, Cristiano. Y, por supuesto, Bale, que jugó un encuentro sobresaliente y se ganó la ovación que le dedicó el Bernabéu que antes tantas veces se ha echado encima del galés por su apatía. Bale no sólo marcó, sino que fue quien dio la asistencia de gol a Benzema, y estuvo en casi todos los ataques de un equipo que pasó por encima del Sevilla en el primer tiempo pero que sólo logró entonces un gol y, curiosamente, cuando peor jugó y tuvo menos continuidad, tras el descanso, marcó tres.

También el Bernabéu se rindió a Benzema al retirarse, porque el francés fue, junto a Keylor Navas, uno de los principales protagonistas de un choque muy atractivo, ya que el Madrid quiso jugar y jugó y provocó el pánico en la defensa sevillista, que bastante tuvo con no llevarse una goleada aún más abultada. Entre los protagonistas negativos, sin embargo, destacaron el colegiado y sus ayudantes, porque se anularon sendos goles legales, por presuntos fueras de juego, a Bale (minuto 17) y a Gameiro (minuto 62), no se señaló otro penalti a Benzema en el 41, porque el francés no se quiso tirarse, y Estrada Fernández tampoco acertó en el penalti de Reyes a Modric, quien provocó la caída cuando ya se estaba yendo al suelo. En cualquier caso, el arbitraje no influyó, porque el Madrid fue tan dominador y superior que no debe haber lugar al debate.