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COLPISA
Miércoles, 18 de febrero 2015, 22:38
Lucas Silva no quiso que su debut como titular en el Real Madrid en la Liga de Campeones fuera recordado como un mal comienzo. Por eso, el brasileño que ocupó de la derecha del centro del campo para apoyar a Toni Kroos se dedicó básicamente ... a recuperar balones y entregar la pelota a sus compañeros con pases cortos cuando dispuso del balón en su poder. Pero incluso con su estilo conservador el sudamericano estuvo a punto de arruinar sus intenciones cuando cometió una falta innecesaria en la primera parte sobre Höger al borde del área que se explica por la falta de costumbre de un recién llegado a una competición diferente. Afortundamente para el número '16' del Real Madrid los germanos no aprovecharon la oportunidad.
El único momento en que se salió de su papel fue con un disparo en la primera parte que salió muy desviado y con el que se ganó la reprimenda de Cristiano Ronaldo por elegir tirar en lugar de cederle el balón. En la única ocasión en que intentó un regate, la presión de los alemanes acabó quitándole el balón en una jugada que terminó con un remate al larguero de Platte.
Sin embargo, su participación resultó secundaria en la victoria del Real Madrid en Alemania puesto que su mejor acción en defensa fue un despeje al borde del área en un saque de esquina. Cometió dos faltas, ganó un balón aéreo e hizo dos entradas en unos noventa minutos en el que el balón pareció que le quemaba en los pies cuando lo tenía, como demostraron las estadísticas: la posesión del balón del brasileño fue la mitad que la de sus compañeros Toni Kroos e Isco.
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