Platini, abandonado por la UEFA en la carrera por la presidencia de la FIFA

A pocas horas de la clausura del plazo de candidaturas, ocho son los candidatos en liza para suceder al presidente dimisionario Joseph Blatter: el suizo Infantino, el jeque bareiní Salman -que parecen los dos favoritos-, Platini (sigue suspendido por la FIFA), el sudafricano Tokyo Sexwale, el príncipe jordano Ali Hussein, el francés Jérôme Champagne, el liberiano Musa Bility y el trinitense David Nakhid.

Con el anuncio por sorpresa de la candidatura de Infantino, Europa finalmente destapó su plan B para la elección del 26 de febrero. Y supone una mala noticia para Platini, presidente de la instancia europea.

Al lanzar una candidatura alternativa a la del francés, la UEFA claramente da pocas opciones a las posibilidades de que el excapitán del seleccionado francés pueda estar en la batalla hasta el final.

Platini pensaba que tenía camino libre para llega a lo más alto de la FIFA pero su suspensión provisional por la Comisión de Ética de la FIFA debido a un pago de 1,8 millones de euros por parte de Joseph Blatter en 2011, cambió el panorama electoral de forma abrupta.

Prueba del aislamiento de Platini, en el comunicado de apoyo del Comité ejecutivo de la UEFA (el órgano de gobierno del fútbol europeo) a su secretario general Gianni Infantino no se menciona el nombre del francés. "Estamos encantados con que Gianni se presente", precisó la Confederación Europea.

El 15 de octubre, la UEFA había apoyado a Platini, su presidente durante esta tormenta de corrupción. Pero esta unanimidad se comenzó a resquebrajar: la Federación Inglesa retiró su apoyo al día siguiente.

Después la FIFA decidió el 20 de octubre esperar hasta el fin de la suspensión del triple ganador del Balón de Oro para examinar su candidatura. Ante la imposibilidad de hacer campaña por la sanción, Platini ya estaba de facto fuera del escrutinio. La candidatura de Infantino no hace más que confirmar la soledad del francés.

En el entorno de este último, esto ha sido un golpe duro de encajar y se mostraron "sorprendidos" de que la UEFA haya ignorado su nombre en el comunicado. "Michel Platini nombró como mano derecha en la UEFA a un gerente, y se encuentra con que este gerente hace mucha política", afirmó esta fuente a la AFP.

Según el lado de Platini, Infantino aseguró "de palabra" delante del Comité ejecutivo de la UEFA del lunes que se retiraría en caso de que Michel Platini fuera absuelto. Pero el entorno del francés se muestra muy escéptico: "la verdad de hoy en política, no es la misma que la de mañana"

Según fuentes próximas al informe, Infantino tomó el pulso a muchas federaciones no europeas, sobre todo asiáticas, antes de iniciar esta carrera. Este abogado italo-suizo camina por las marcas dejadas por su presidente, que inicialmente contaba con el apoyo de cuatro de las seis Confederaciones (Europa, Asia, Sudámerica y Concacaf).

Platini, de todas formas, había visto su plan saltar en pedazos por los aires en las últimas horas con la entrada en liza de un verdadero peso pesado, el jeque Salman ben Ibrahim Al-Khalifa, miembro de la Familia Real de Baréin y poderoso patrón de la Confederación Asiática (AFC), que inicialmente había apoyado al galo.

La sanción de Platini ha abierto de manera ostensible la elección presidencial: el número de ocho candidatos es inusualmente alto para unas votaciones en las que el presidente Blatter siempre se enfrentó a pocos adversarios.

Además de Infantino y el jeque Salman, Tokyo Sexwale, antiguo compañero de celda de Nelson Mandela, parece contar con ventaja, sobre todo fuera del mundo del fútbol.

El sudafricano, con la aureola de su combate contra el apartheid, proyecta una imagen de integridad, lo que cuenta mucho a la hora de intentar presidir una instancia golpeada por los escándalos de corrupción.

Los otros candidatos, el príncipe jordano Ali Hussein; el francés Jerome Champagne, exsecretario general adjunto de la FIFA; David Nakhid, excapitán de la selección de Trinidad y Tobago; y Musa Biliti, presidente de la Federación Liberiana, no tienen el suficiente peso político como para esperar hacer grandes cosas.