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ANA ANDA CENICEROS
Martes, 9 de febrero 2016, 01:18
logroño. Muchas familias sufren este problema sin atreverse a contárselo a nadie. Los niños tienen vergüenza y no lo hablan con sus amigos, si lo hicieran se reirían de ellos. Pero en un tiempo en el que los niños cada vez tienen más relaciones sociales que incluyen la noche: campamentos, dormir en casa de amigos., las familias necesitan ayuda.
Se llama enuresis a la micción involuntaria durante el sueño en niños a partir de los 5 años y con una frecuencia de dos noches o más a la semana, aunque no existe acuerdo entre las sociedades científicas sobre la frecuencia de noches húmedas para establecer el diagnóstico y la gravedad.
Las causas no están claras. Se ha relacionado con una menor producción de la hormona antidiurética durante el sueño. Todos la producimos por la noche para poder aguantar sin ir al baño, pero parece que estos niños la producen en menor cantidad. También se ha relacionado con un problema de despertar: la sensación de vejiga llena no despierta al niño. Y además interviene la genética, porque se ha comprobado que cuando uno de los padres fue enurético existe un 30 por ciento de posibilidades de que su hijo también lo sea y, un 50 por ciento de posibilidades, si lo fueron los dos padres.
¿Qué podemos hacer?
Debemos ser comprensivos y no culpar al niño, no lo hace a propósito. Es importante que le impliquemos en la limpieza de la cama y en su propio aseo, para que sea consciente del problema y de la solución. Podemos poner fundas impermeables en la cama y no usaremos pañales, para que sea consciente de que está mojado. También hay que reducir la ingesta de líquidos antes de acostarse e ir al baño antes de dormir.
Se puede motivar a los niños con calendarios de soles si por la mañana sale seco, o nubes si sale mojado, esto puede servir para valorar la evolución y elevar la autoestima. En cambio, levantar al niño para que vaya al baño, aunque esté dormido, sirve para que duerma seco pero no ayuda a curar la enuresis.
Podemos acudir a nuestro centro de salud. Allí nos harán unas preguntas para valorar el tipo de enuresis que nuestro hijo padece. Puede ser primaria, si nunca ha existido un periodo de al menos 6 meses sin que mojara la cama o secundaria en la que después de un periodo de al menos 6 meses de noches secas, aparece de nuevo la enuresis. También nos preguntarán si el único síntoma que tiene nuestro hijo es que moja la cama por la noche o si además hay otros síntomas como que tiene que ir corriendo a hacer pis o si se le escapa el pis durante el día. Intentarán descartar otros problemas que pueden provocarla, como causas emocionales, el estreñimiento, las lombrices y menos frecuentemente la diabetes mellitus y la diabetes insípida.
La exploración suele ser normal y la única prueba necesaria es el diario miccional, que deben rellenar los padres y el niño y que mide cuándo, cuánto y cómo orina cada vez. Hay que registrarlo durante 3 días que no tienen por qué ser consecutivos (se pueden hacer en fin de semana). También sería bueno hacer un registro de las defecaciones y sus características al menos dos semanas, para descartar el estreñimiento.
Algunos niños pueden tener una resolución espontánea, sobre todo si son menores de 8-9 años y tienen menos de 3 noches húmedas a la semana. Sin embargo, debemos dejar claro que la curación de la enuresis no es algo que podamos conseguir a corto plazo, sino que a veces conseguir tener todas las noches secas durante al menos 6 meses va a ser algo que nos va a costar conseguir.
Tratamiento
Los únicos tratamientos que han demostrado utilidad y son seguros son la alarma y un fármaco que se llama desmopresina.
La alarma necesita implicación del niño y de la familia, si no no sirve de nada. Su respuesta suele ser un poco lenta, hasta 3 o 4 meses. Actualmente las más usadas y baratas son las portátiles, que se ponen en la ropa interior y cuando detecta humedad el sensor emite luz y/o sonido para que deje de orinar, se cambie de ropa y vuelva a dormir.
El tratamiento con desmopresina es más rápido, sobre todo si el número de noches mojadas es pequeño. A veces se usa cuando se necesita tener noches secas durante un campamento, etc. Se trata de un medicamento seguro. Se recomienda administrar una hora antes de acostarse e ir al baño y restringir la ingesta de líquidos una hora antes de tomar la medicación hasta 8 horas después de la administración.
Se pueden utilizar los dos tratamientos juntos, sobre todo en niños que mojan la cama varias veces en una noche, para disminuir el número de micciones y facilitar así el uso de la alarma.
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