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PÍO GARCÍA
Sábado, 5 de diciembre 2015, 01:32
logroño. El juicio por el caso 'Vatileaks 2' continuará el lunes en la Santa Sede, pero el culebrón de sexo, mentiras y documentos secretos no entiende de aplazamientos. El penúltimo capítulo se vivió en la noche del pasado 1 de diciembre, cuando la relaciones públicas ... Francesca Immacolata Chaouqui compareció en carne mortal en el programa 'Ballarò', de RAI 3.
Francesca ya había colgado un post en Facebook para asegurar que todo lo que le había contado Vallejo Balda a su primer abogado (y que el diario La Repubblica reprodujo) era mentira. El pasado martes, en una entrevista emitida por la televisión pública italiana, completó su versión de los hechos.
Los lectores más fervientes de esta novelita de intrigas y amoríos recordarán que el sacerdote riojano había escrito un memorial durante sus primeros días en el calabozo. En él, reconocía que había pasado documentos a los periodistas Gianluigi Nuzzi y Emiliano Fittipaldi, pero insinuaba que había obrado bajo el maléfico influjo de Francesca Chaouqui, su antigua colaboradora, quien le «sedujo» en un hotel de Florencia y a la que temía por su nutrida agenda de contactos y por su supuesta pertenencia a los servicios secretos italianos.
Francesca Immacolata Chaouqui lo niega todo. O casi. Sostiene que el cura de Villamediana ha sido el «único 'cuervo'» de esta historia. En el argot vaticano, 'cuervo' es el tipo que roba y filtra documentos secretos de la Santa Sede. Pero niega que actuase bajo su recomendación y menos aún que mantuviera relaciones sexuales con ella. Chaouqui confirma que ambos estuvieron la noche del 28 de diciembre del 2014 en el hotel 'Cavalieri Palace' de Florencia, un alojamiento de lujo en pleno centro de la capital toscana, cuyas habitaciones cuestan a casi 300 euros la noche. Pero Francesca dice que no pasó nada. Más aún, revela que Balda acudió a la cita su madre, con quien compartió habitación. «Es completamente inventado y una bellaquería -se indigna Chaouqui- porque además Vallejo Balda conoce bien a mi marido y a mi familia».
En la entrevista con Massimo Giannini, conductor del programa, Francesca Immacolata Chaouqui, que niega pertenecer a los servicios secretos, se lamenta sobre todo de «no haber sido capaz de evitar que monseñor Balda se comportase de ese modo». Asegura que el cura riojano entregó a los periodistas los 'passwords' de los documentos secretos y que fue entonces cuando mantuvieron una «discusión muy fuerte», a raíz de la cual dejaron de hablarse y rompieron todas sus relaciones.
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