Un centenar de detenidos en la manifestación en la capital francesa

Una manifestación por el clima en las calles de París acabó ayer con cerca de cien detenidos y con la Policía francesa lanzando gases lacrimógenos contra «un grupo de violentos». Entre 2.000 y 3.000 personas se habían concentrado en la plaza de la República ante el comienzo de la COP21 y desoyendo las restricciones del estado de emergencia decretado por el Gobierno francés después de los atentados del 13 de noviembre que prohibe este tipo de concentraciones. Al grito de «Estado de emergencia, Estado policial», varios centenares de manifestantes, muchos de ellos encapuchados, lanzaron piedras y objetos contra los agentes.

Horas antes, varias organizaciones habían engarzado una cadena humana a lo largo del bulevar Voltaire. En esa protesta, las consignas ambientalistas se mezclaban con el desafío a quienes sembraron la muerte en la ciudad. «No les tememos a los terroristas ni a las multinacionales», proclamaba una pancarta colgada del cuello de una mujer, en referencia a los grandes grupos industriales acusados de acelerar el cambio climático. '¡Por un clima de paz!', rezaban otros carteles cerca del 'Bataclan', donde fueron asesinadas 90 personas.

En Madrid, unas 10.000 personas participaron en la marcha que arrancó en la plaza Cibeles y terminó en la Puerta del Sol. Entre los mensajes se podía leer «La Tierra es tu hogar» y «Ayúdame, Ayúdate». En Londres, miles de personas y numerosos artistas exigieron que esta Conferencia no se salde con un fracaso como ocurrió con la de Copenhague en el 2009. «Este clamor popular tiene que ser oído. Esta cumbre histórica tiene una importancia vital», declaró a AFP la actriz Emma Thompson. «La amenaza es seria, hay que actuar. Si somos lo bastante numerosos, los políticos tendrán que escucharnos», dijo por su lado el músico Peter Gabriel.