El blues por fin deja ver las estrellas

Por fin el tiempo atmosférico permitió abrir el Cameros Blues Festival cómo se esperaba. Al igual que el año pasado, para inaugurar el programa se eligió una cita íntima, en el parque sobre la ribera del Leza, con un concierto de formato acústico y una observación de las estrellas bajo el título de 'El blues de las esferas'. El marco fue otra vez incomparable, y el cielo, encapotado desde el jueves, escampó tras la lluvia de la tarde.

El doctor en Física Manuel Montejo, que acudió desde Andoain (Guipúzcoa) con un telescopio, ofreció al público algunos trucos para detectar y reconocer las estrellas más brillantes del firmamento, así como, también, respondió a algunas preguntas de los presentes. La Estrella Polar y el planeta Saturno con sus anillos fueron algunos de los astros que se pudieron ver en la noche de Laguna. También el Cinturón de Orión. Mientras sonaba la música, el público se acercaba al telescopio y curioseaba el cielo con las explicaciones de Montejo. «Me ha dado hasta un escalofrío al ver los anillos de Saturno», confesó Tomás García, organizador del festival y uno de losprimeros espectadores en observar el cielo del Camero Viejo.

La celebración de esta actividad es pertinente y merece la pena porque Laguna de Cameros forma parte de la Reserva Mundial de la Biosfera de La Rioja declarada así por la Unesco. Además, este fue elprimer territorio español en el que coincidieron dos reconocimientos. El segundo fue la declaración como 'Destino Starllight', destacando el brillo del cielo de la zona.

Mientras tanto, actuaban Quique Gómez y Curro Serrano. Los músicos madrileños ofrecieron los primeros compases en directo del Cameros Blues Festival gracias a la armónica y la guitarra. Fue un concierto de blues y jazz, a pie de hierba. El dúo eligió un repertorio de clásicos del blues y fue atrayendo al público con la armónica. Poco a poco formaron un corro a su alrededor, a modo de entrañable campamento de verano, mientras se cocinaba la queimada. El brebaje sirvió para calentar al público que disfrutó y sufrió la baja temperatura. ¡E incluso hubo público llegado desde Australia!