Cariño de ida y vuelta

Me entró ansiedad y depresión. Estoy en tratamiento psicológico y con medicación desde hace meses». Con esta crudeza describía hace unas semanas Gustavo Alonso su situación personal. El que fuera pivote del Club Balonmano Cuidad de Logroño durante los dos primeros años de su aventura en Asobal, reclama 50.000 euros «los ahorros de mi vida» al Octavio de Vigo por impago pendiente de un juicio previsto para mayo de este año y reconoce que es el sueldo de panadera de su mujer, María Antonia, lo que les permite «tirar del carro».

Las palabras de Gus, como se le conoce en el mundo del balonmano, recogidas en el Diario Montañés y reproducidas por larioja.com conmovieron a la sección femenina de la Peña Maiden (incondicionales del equipo). Su primera reacción fue dedicarle una pancarta de ánimo que exhibieron en el último partido disputado en el Palacio, el Naturhouse-Ademar León. Para entonces ya habían contactado con el pivote cántabro a través de las redes sociales para mostrarle su apoyo.

Gracias a la colaboración del capitán Gurutz que se encargó de conseguir la dirección de Gus y aportar sus propias palabras de cariño la Peña Maiden dio un paso más. Hasta el buzón de Gus en Cantabria viajó una felicitación navideña con frases de ánimo de varios miembros de la peña así como un montaje con sus mejores momentos en Logroño y dibujos infantiles.

«Hoy me han hecho emocionarme de verdad y ya es difícil en mí» escribió Gustavo en su perfil de facebook junto a los recortes de prensa que le envió la Peña Maiden.

Jugadores que pasaron por el equipo como Pérez Marne, Marc Amargant, Guillermo Barbón, o el extécnico Alberto Suárez le dieron al Me gusta.

La garra, el compromiso y la entrega total que Gustavo demostró en el Palacio ha llegado a su hogar desde Logroño en forma de cariño. «Muchas gracias por vuestro apoyo. La vida sigue. Hay que seguir luchando».