Intentar otra hazaña

El Naturhouse lleva toda la temporada en el borde de lo casi imposible. Pocos esperaban que este equipo mejorara al del año pasado. Nadie (o casi) creía que este equipo iba a estar a punto de meterse en la Copa. Y si alguien preveía que a estas alturas el Naturhouse iba a estar luchando por Europa, se lo tenía muy callado.

Ahora, cuando apenas queda un mes para que termine la liga, el Naturhouse acomete la que sería su última hazaña: sobrevivir a un calendario temible para mantener en pie el sueño europeo. A partir del sábado llegarán Granollers, Barça y Ciudad Real. Pero antes, esta noche, es el turno del Reale Ademar León.

Sólo hay cuatro equipos a los que el Naturhouse no haya conseguido ganar nunca, y uno de ellos (los otros son Ciudad Real, Barça y Torrevieja) es el Ademar. No es ninguna casualidad, claro, porque los leoneses están con justicia, y desde hace años, en el club de los grandes de Europa.

Puede que este año, que empezó con muchas promesas, haya quedado un poco gris para los leoneses. Ademar empezó como un tiro, viendo la liga desde el primer puesto durante mucho tiempo. Esa buena racha culminó con la conquista de la Copa Asobal.

Y casi terminó ahí, porque el 2009 no ha sido nada bueno para el Ademar. Ha visto cómo poco a poco la tabla clasificatoria iba resbalando bajo sus pies, sobre todo por su incapacidad para ganar lejos de casa: es su peor racha a domicilio en 15 años. Así, Ademar comenzó la jornada pasada como sexto, aunque su victoria en casa frente a Arrate le ha hecho remontar hasta la cuarta posición.

Es evidente que el Ademar que llega hoy al Palacio es un conjunto que no puede conceder ninguna ventaja más. Es, como dice el tópico, un equipo herido. Y es un gran equipo, una plantilla envidiable para casi cualquier club del mundo. Desde el puesto de central -Sarmiento y García Vega- hasta los extremos -Stranovsky y Krivochlikov- pasando por todos los demás puestos, incluyendo unos laterales -Bicanic y el hoy ausente Denis Buntic- terribles.

Aunque puede que la clave de este equipo esté en la parte de menos nombre: la defensa. Un 6-0 muy duro, que alimenta a los extremos al contraataque. No perder demasiados balones, y correr muy bien hacia atrás, será crucial para el Naturhouse si quiere hacer algo contra Ademar. Porque no hay que olvidarlo: sería otra hazaña.