

Secciones
Servicios
Destacamos
L.J. AYENSA
Lunes, 16 de febrero 2009, 11:25
Los rojillos cumplieron los pronósticos y vencieron sin problemas al Fundación Logroñés. Un partido cómodo, que tuvieron controlado en todo momento los hombres de Abadía y que podía haber acabado con un marcador mucho más abultado que el 2-0 que reflejaba el marcador del Municipal.
Sólo se vio algo al Fundación durante el primer cuarto de hora, con un Calahorra dormido, que fallaba una y otra vez en la medular y que tenía muchos nervios y poca comunicación en la línea defensiva, lo que no aprovechó su rival.
Dos disparos lejanos sobre el marco de Moisés, el primero en el 13 de las botas de Pavía y el segundo en el 71 de falta directa de Sergio, fueron la única pincelada visitante en una tarde que sólo tuvo el color rojo de las camisetas locales. El Calahorra salió con el esférico jugado desde atrás, esperando su oportunidad, abriendo a las bandas y dejando atrás a Murugarren y David Díez como único muro, con mucha profundidad y llegada de sus laterales.
El tándem Metola-Javi Sánchez tardó en acoplarse, ralentizando el juego, pero al final encontró una vía de agua por la banda de Iñaki, que sufrió la presión de Diego y Roberto para desbaratar su juego.
Además, el Calahorra jugó sencillo, con balones a la banda de Iñaki, éste apurando hasta la línea de fondo y sirviendo a Fúriga, que es el pilar fundamental en la delantera rojilla, por la fuerza que tiene en sus llegadas. En el 18 avisaba el ariete argentino del Calahorra finalizando la internada por la banda de Iñaki, pero en esta ocasión José desvió en la misma línea. Poco después Metola perdonaba el primer gol delante de José, disparando a sus manos.
El 1-0 llegó en el 35, después de una gran individualidad de Ignacio que dejó en el suelo a tres defensores y solo delante de José, el cancerbero lo cazó para evitar que entrase el jugador rojillo hasta el fondo de la portería. Javi Sánchez fue el encargado de transformar.
Antes del descanso, de nuevo Fúriga quitaba la pintura del larguero tras saque desde la esquina de Sánchez. De vuelta al partido, los rojillos saltaron al césped con hambre de gol, y sin dar un respiro al equipo rival. Ya en el minuto cuatro Ignacio pudo sentenciar el encuentro pero Diego logró rebañar el balón cuando cruzaba la línea.
En el 60 los locales lograban su recompensa y Sota convirtió en gol un balón suelto en la medular. Los visitantes se cerraron atrás para aguantar el monólogo rojillo, con un aislado Álex en la punta, y luchar para frenar a un Calahorra que quería más y que todavía disfrutó de hasta cinco ocasiones claras para marcar.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Valdecilla agota las plazas MIR de Anestesia y de Ginecología
El Diario Montañés
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.