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F.V. RAMOS
Domingo, 2 de noviembre 2008, 15:54
Ya pueden estar satisfechas las jugadoras del Haro Rioja Voley porque ayer por la tarde vendieron cara su derrota en El Ferial ante el CAV Murcia, bicampeón de la Superliga femenina 1. En un agónico tie break que se decantó por la mínima (14-16), las azules hicieron un partidazo ante un candidato más que claro al título de la presente campaña. Priscila Rivera fue la máxima anotadora, 24 puntos, seguida por Tifany Dodds, con 18.
El Haro Rioja Voley tardó un poco en despertar del sueño ante el CAV Murcia y es que el equipo dirigido por Hugo Gotuzzo protagonizó una verdadera batalla ante las vigentes bicampeones de España, donde mostró un juego tan brillante como efectivo en el que arrancaron con un 0-1 en contra rápidamente corregido por las manos mágicas de Meritxell. Aunque estaba bien claro de que el local iba a sufrir mucho en el choque, las azules llegaron arriba tanto al primer como al segundo tiempo técnico (8-4 y 16-12), pero para llegar a esa diferencia la batalla fue mucho más igualada y competida. El juego propuesto por Meritxell fue clave pues no recargó las salidas de ataque sólo en una jugadora sino que aprovechó bien todo el frente de ataque y repartió fundamentalmente con cuatro, que se llevaron un total de 15 puntos: Dani da Silva y Dodds (4 cada una), Williams y Boscacci (3 para cada una). Las azules se llevarían el set por 25 17.
El Murcia salió en el segundo set a comerse la pista del Ferial, herido por la verdadera paliza recibida en el primero. Si las visitantes proponían juego duro vía Rivera y Mladenovic, ahí estaban Dodds y Williams para contestar la afrenta. Punto a punto y golpe por golpe se jugaron los primeros puntos (2-2, 4-4 y 7-7), aunque esta vez fue el conjunto comandado por Pascual Saurín el que tomó una rápida ventaja ante las jarreras (7-9, 8-12 y 14-16). Pese a la resistencia local, el Murcia supo contener a Dodds y a Da Silva y se aprovechó de los errores en ataque y en recepción de las azules para castigar donde más duele: 19-25.
Si las cosas estaban igualadas en el segundo, el tercero no sería la excepción. El Haro había encontrado la manera de ponerle un freno momentáneo a Rivera y a Mladenovic y fue Williams, con un primer tiempo tirado de manual, la encargada de llevar a las suyas en ventaja al segundo tiempo técnico. Pero las murcianas apretaron y le dieron la vuelta al marcador, pese a los esfuerzos y la garra que mostraron en pista las jarreras. Rivera fue otra vez el verdugo en el set ball y no perdonó (23-25).
El saque de Williams le dio grandes réditos al Haro en el inicio del cuarto set. Los primeros puntos de la cuarta manga fueron de tanta tensión que, con el marcador 5-5, ambos entrenadores ya habían utilizado su primer tiempo de descanso, pero la igualdad no desaparecería (7-7, 9-9 y 13-13) y para sumar un punto había que trabajar, y mucho. Marta Fraile sustituyó a Meritxell para inyectar un poco de energía después de tanta lucha y la encontró en Boscacci, que le puso un paradón tremendo a Rivera en el 21-18 para mantener a su equipo en el partido y Blas extendió la ventaja con un ace que lastimó el corazón murciano. Tres puntos separaban al Haro del sueño del tie break y lo consiguió dejándose la piel en la pista riojana por 25-21.
A todo o nada, así se juega un quinto set. La última manga lo tuvo todo, como el partido: paridad (4-4, 6-6 y 7-7), suspense, polémica y emoción, que aumentó cuando el Haro llegó en ventaja al cambio de lado de campo (8-7). El Murcia dio la vuelta otra vez al marcador y por dos veces consecutivas las azules igualaron (11-11). El Haro llegó a tener el primer set ball de la tarde, pero Rivera sentenció la contienda con un bombazo por posición cuatro y marcó el 14-15 para las murcianas que sería definitivo. Un bloqueo a Williams determinó el 14-16 y acabó con casi 30 meses de imbatibilidad del equipo en El Ferial.
Las jarreras hicieron un gran partido ante las murcianas; sin embargo, el resultado dejó un sabor agridulce al entrenador Hugo Gotuzzo, que destacó «el esfuerzo del equipo». «Deberíamos estar contentos por haberles sacado dos sets a un equipo que seguramente peleará mano a mano la liga con el Tenerife. Pero haber estado tan cerca me ha dejado triste porque podríamos haber logrado dos puntos de oro con los que hubiésemos hecho historia. Aunque cuando mire el partido probablemente entienda de que hemos logrado algo muy importante», explica Gotuzzo.
Dani da Silva se mostró conforme, aunque admite que se estuvo cerca de otra campanada: «Tuvimos muy buenos momentos ante el vigente bicampeón, y aunque el partido salió como queríamos tal vez tuvimos esos fallos dentro de la pista que son lógicos de un equipo que se estrena en la categoría. Pero nos quedamos con la sensación de que podemos», explicó Da Silva.
La liga se presenta aún más reñida de lo que muchos esperaban: «No alcanzará con jugar bien en casa», vaticina Gotuzzo, «habrá que jugar a este nivel en todas las canchas».
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