Logroño renueva su vehículo de control de alcoholemias

Coche nuevo. El delegado del Gobierno en La Rioja, José Antonio Ulecia, le dio ayer las llaves al alcalde, Tomás Santos. El vehículo sustituye a otro anterior que se ha quedado desfasado para realizar controles de alcoholemia. Ulecia recordó que la Dirección General de Tráfico pone el vehículo, el instrumental necesario para las pruebas y el mantenimiento, mientras que el Ayuntamiento lo utiliza y comunica los resultados de sus campañas.

El representante gubernamental aseguró que se está consiguiendo que baje la incidencia del consumo de alcohol entre los conductores, de forma que del 6 por ciento de pruebas positivas se ha bajado al 2,19 por ciento, según datos de los exámenes practicados. Si hasta ahora el alcohol estaba, de una forma u otra, en cerca del 50 por ciento de los siniestros en la carretera, en estos momentos su presencia se ha quedado en el 30 por ciento, apuntó el delegado.

Hasta el 30 de septiembre se han realizado 29.422 pruebas de alcoholemia en La Rioja, entre Guardia Civil y las distintas policías, más que durante todo el año pasado, insistió. En lo que tiene que ver con la velocidad, para cuyo control el Ayuntamiento también dispone de un vehículo, Ulecia señaló que si antes su exceso estaba relacionado con el 30 por ciento de los accidentes, la tasa ha bajado al 25 por ciento.

El alcalde, por su parte, destacó las relaciones «especialmente buenas» que hay entre el Ministerio de Interior y el Ayuntamiento de Logroño y las ejemplificó en los frecuentes controles mixtos (Policía Nacional-Policía Local) que puede ver cualquier cuidadano logroñés.

A la vez, deseó que siga reduciéndose el índice de conductores que han tomado alcohol y llamó «a la cordura» de manera especial al colectivo juvenil.