Poco y mucho

Poco y mucho se pudo ver ayer en el derbi riojano de fútbol sala femenino. Poco fútbol -las chicas de ambos equipos no tuvieron su mejor tarde en el Palacio de los Deportes- y mucho apoyo en las gradas, con dos aficiones intermitentes en sus gritos pero que no dejaron de arropar a las jugadoras ya que, todas, jugaban en casa.

La presión se respiraba en el ambiente y bien por los nervios o porque ni ellas se encontraban en el parqué, las jugadas no terminaban de cuadrar y los ataques tardaron en llegar.

La primera ocasión fue para el Teccan en el minuto 3 y en el 7 para las que ejercían de locales, con Beatriz sola ante la guardameta visitante que no pudo regatear en condiciones para anotar.

Si las jugadas llegaban con cuentagotas los goles, también. En el 10 Sandra aprovechó un rechace de otro remate de María y batió a Ester. 0-1 que permaneció en el electrónico hasta ya entrada la segunda mitad, en el 24, con un golazo de Mamen desde casi el centro del campo.

Las rojas se vinieron arriba y anotaron dos más antes de finalizar el encuentro para consolidar su victoria. En el 25, se adelantaron en el marcador con un gol de Chiqui, que metió el tanto con un caño a la portera en un contraataque iniciado por Beatriz, y en el 31 en las botas de Marga, que de nuevo anotó pasando el balón por debajo de las piernas de su tocaya.

Fue un derbi soso, con más espectáculo en las gradas que la cancha, que se quedó para las del Palacio y que suma tres puntos en el casillero del Diamante.